Anoche, mientras dormía,
soñé, ¡bendita ilusión!,
que una fontana fluía
dentro de mi corazón.
Di, ¿por qué acequia escondida,
agua, vienes hacia mí,
manantial de nueva vida
de donde nunca bebí?
Anoche, cuando dormía,
soñé, ¡bendita ilusión!,
que una colmena tenía
dentro de mi corazón;
y las doradas abejas
iban fabricando en él
con las amarguras viejas
blanca cera y dulce miel.
Anoche, cuando dormía,
soñé, ¡bendita ilusión!,
que un ardiente sol lucía
dentro de mi corazón.
Era ardiente porque daba
calores de rojo hogar,
y era sol porque alumbraba
y porque hacía llorar.
Anoche, cuando dormía,
soñé, ¡bendita ilusión!
que era Dios lo que tenía
dentro de mi corazón.
Amigo Floren, te felicito de verdad, eres un hombre polifacético,benditas ilusiones de las que nos habla Machado, son las que nos ayudan y nos hacen el camino mucho mas agradable en estos tiempos de crisis.
ResponderEliminarUn abrazo desde Caracas
Aún tengo la música en la cabeza!!
ResponderEliminarNada más leer los primeros versos, recordé que este poema tuve que comentarlo en clase, hará ya 2 años de eso. ¿Cómo creó la música?
ResponderEliminarTengo un par de programas que me permiten escribir música en pentagramas y luego interpretarla en un teclado conectado.
Eliminar